Buenos días:
Los Ánodos de Magnesio son muy sensibles a la corrosión absorviendo toda la reacción química que se produce durante la oxidación, de esta forma son ellos los que sufren la corrosión mientras el elemento al cual protegen permanece en perfecto estado.
La existencia de esta pieza suele ser desconocida para la mayoría, sin embargo un buen mantenimiento de este ánodo o la sustitución del mismo cuando ha llegado al límite de su vida, puede evitar la perforación por oxidación del calentador o acumulador. Algunos de los problemas derivados de una mala conservación son las temidas inundaciones.
El mantenimiento del ánodo de magnesio es una tarea muy sencilla si se tiene acceso al ánodo desde el exterior, la tarea puede ser más laboriosa si para acceder al ánodo se debe desmontar el calderín.
A continuación explicamos cuáles son los pasos que hay que seguir:
1. Por seguridad, desconectar el termo de la red eléctrica.
2. Cerrar la llave de entrada del agua
3. Abrir un grifo de agua caliente para quitar la presión.
4. Cerrar la llave de paso de la salida de agua caliente.
5. Vaciar el termo hasta la altura a la que se encuentre el ánodo.
El período de vida de un ánodo depende de muchos factores, el tipo de agua, la temperatura a la que esté regulado el termo, el consumo de agua y el modelo de termo. Normalmente se recomienda efectuar una revisión al año de la instalación del termo y en función del estado en que se encuentre el ánodo repetirla de forma periódica.
Si necesitas cambiarlo, puedes acceder a nuestra sección de Ánodos pinchando aquí.
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Marta Fernández Blanco
Responsable Comercio Online
Recambios y Accesorios de Electrodomésticos
www.eSpare.es
Telf.: 672 21 56 59
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